sábado, 18 de febrero de 2012

TEMPLO DE LA ILUMINACIÓN

Jerarca
Dios y Diosa Merú.

El Dios Merú es el arquetipo de toda la Sexta Raza-Raíz con sus siete Sub-Razas, cuya perfección final se expresará en el Continente Suramericano en un futuro no muy distante. Esto significa que Él es la perfecta Imagen Divina para cada uno de los incontables millones de chispas espirituales que han sido llamadas a evolucionar sobre la Tierra por esta Llama Divina.

Todos los individuos que pertenecen a la Sexta Raza-Raíz están especialmente bajo Su cargo, doquiera que puedan estar viviendo actualmente sobre la Tierra. Él nunca sabrá lo que es la total liberación de las responsabilidades de la custodia, hasta que todas y cada una de estas almas individuales se haya desarrollado y madurado en el salón de clase de la experiencia terrenal.


Ubicación
En el corazón de la Cordillera de los Andes, cerca del Lago Titicaca.


Servicio/actividad del Retiro
Amorosamente reciben en Su Retiro a todos los chelas sinceros que estén profundamente interesados en el DESARROLLO IMPERSONAL de una Iluminación Divina cada vez mayor, la cual tales chelas podrán utilizar entonces para servir a sus prójimos –al no estar dichos chelas interesados únicamente en el acrecentamiento de conocimiento personal.

Aquí, a los chelas se les instruye meticulosamente, se les guía y se les protege en sus esfuerzos diligentes por desarrollar desde su propio interior, la Llama de la Iluminación con sus virtudes acompañantes de Discernimiento, Discreción, Diplomacia y Sabiduría, para el más grande beneficio posible del género humano en pleno.


Llama sostenida en el Retiro
Llama de la Iluminación, dorada con el centro blanco y radiación rosa.
Rayo de la Iluminación, color Rosa.

Este Rayo Femenino de color rosa es uno de los dos Rayos Cósmicos que realmente conforman el eje de la Tierra. El Rayo Rosa entra a la Tierra en un punto cerca del foco de este Retiro. El otro Rayo que ha estado más activo hasta ahora, entra a la Tierra en un punto focal en los Montes Himalayas, y estos dos Rayos se encuentran en el centro de la Tierra, conformando un gigantesco foco de Luz en su centro.

A medida que la humanidad vaya entrando en una expresión cada vez mayor de la Edad Dorada final y permanente en este planeta, el Rayo Rosa Femenino asumirá una actividad cada vez más poderosa, y aquellos peregrinos que buscan iluminación espiritual y guía serán atraídos de ahora en adelante a Suramérica, de la misma manera que anteriormente fueron atraídos a los Himalayas.


Hermandad
Hermandad de la Iluminación.

La Hermandad de la Iluminación irradia hacia adelante la Llama de la Iluminación para beneficio de toda la raza humana. También son los Custodios el Rayo Femenino de la Tierra.


¿Cómo cooperar?
A medida que los chelas conscientes todavía encarnados vayan reconociendo la presencia del Santo Monte Merú y sus amados guardianes, visitando este foco de iluminación en conciencia, los primeros canales de energía en el mundo de las apariencias físicas se abrirán, así, a esta gloriosa fuente de sabiduría. Luego, más tarde, cuando los senderos internos hayan sido bien definidos y claramente abiertos, será más fácil realizar los senderos físicos que lleven a ciertos focos de Luz que hasta entonces habían estado inaccesibles a la conciencia externa de la gente.

Es de particular importancia que se haya abierto ahora el Retiro del Gran Dios Merú a los chelas que están en el Sendero, ya que es muestra de que la Gran Hermandad Blanca se está uniendo con seres no-ascendidos en un esfuerzo por intensificar la Radiación y Poder del Rayo Femenino y, así, acelerar la preparación del Continente Suramericano para ser anfitrión a los hijos de la Séptima Raza-Raíz, quienes están destinados a encarnar allí.

Dicen los Maestros: "...vengan ahora, aquellos de ustedes que buscan iluminación, conocimiento y entendimiento, al Templo de la Iluminación. Ayúdennos a crear esos senderos espirituales mediante su atención y conciencia proyectada. De esta manera, se convertirán en una parte muy real del trabajo preparatorio necesario para la expansión de la gran Radiación de Merú para beneficio de sus prójimos.

Un periodo de introspección personal y meditación honesta de parte de cada aspirante en cuanto al MOTIVO detrás de su deseo de adquirir más Sabiduría (que es el USO CORRECTO DEL CONOCIMIENTO) producirá frutos en el desarrollo de una honestidad de propósito, la cual antecede la descarga de más bendiciones espirituales. Por tanto, a todo amado chela que desee conseguir más iluminación en su sendero, ¡que se auto-prepare con humildad para entrar al Templo de la Iluminación!".


Descripción del Retiro
En el corazón de una de las más majestuosas montañas de la cordillera de los Andes en Suramérica, está el santuario espiritual y Retiro del gran Dios Merú.

Es menester escalar alto sobre las planicies para llegar a la base del Monte Merú. Si no es por nuestro guía, hubiéramos ignorado la sencilla cabaña de campesino, la cual constituye la entrada externa a este Santo Retiro.

Al acercarnos a la entrada del antiguo santuario, observamos las pilastras labradas toscamente y techo de paja que, a primera vista, desvía el interés y la curiosidad del turista. El guía amablemente nos insta a pasar. Adentro, en la sencillez creada a propósito en la cabaña (similar a otras construidas en la localidad para servir de hospedaje para los turistas y los andinistas), uno es placenteramente sorprendido por la dulce belleza del salón de espera, los magníficos tapices tejidos a mano con motivos de las diversas leyendas de glorias pasadas en Edades Doradas anteriores que cuelgan en las paredes. A lo largo de la pared opuesta se encuentra un bello tapiz con la imagen de uno de los primeros gobernantes de la Civilización Incaica en el acto de elevar la llama hacia el sol de la mañana. Suaves cojines, teñidos con los bellos colores por teñidores nativos, proveen un placentero sitio de reposo para los invitados que espera. Una dulce música de otra era llena el recinto, junto con el perfume de rosas, hibiscos y lirios. Se siente que haber llegado tan lejos dentro de la presencia de la Paz es LO MAXIMO.

Mientras esperamos en este callado y pacífico salón de espera, discretamente se descorre uno de los tapices, y un hombre alto y bien parecido vestido sencillamente con una túnica de lino aparece en la entrada. Nos hace señas que lo sigamos a través del largo túnel que conduce al corazón de la montaña, iluminado por la Luz que siempre acompaña a la presencia de los Seres Ascendidos. Las paredes del túnel revelan las ricas vetas de oro de los Andes y se puede ver cuán amorosa y amablemente estas venas naturales de oro han sido pulidas para sacarles brillo.

Nos movemos en silencio, llegando repentinamente a una gran cueva natural, delineada con la misma sustancia de roca blanca. En el mero centro del salón arde una gran Llama, donde flamea como un gran Sol Dorado de Iluminación, la cual surge hacia arriba en una columna de esencia blanca, y desapareciendo de alguna manera a través del techo de la caverna.

En un gran círculo alrededor de esta Llama central hay más de doscientos cojines, sobre los cuales están muchos de los escogidos, inhalando Su Iluminación y expandiendo sus propias conciencias antes de regresar al mundo exterior a servir a Dios y al hombre. La total sencillez, la paz absoluta, el sentimiento de poder concentrado son casi abrumadores. Silenciosamente, y con total reverencia, nos unimos a Ellos.

En los días venideros, un gran templo será erigido sobre la superficie de la Tierra en honor a esta Llama y sus Guardianes. Por ahora, la actividad, radiación y servicio de la Llama de la Iluminación está custodiados por los Hermanos de la Iluminación, y únicamente Su ESCENCIA se vierte en la atmósfera de la Tierra.


Diario de “El Puente a la Libertad”, Gautama/Maitreya.

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